martes, 3 de diciembre de 2013

Tormenta poética de 10 minutos

Deshaciendo la caída de la luna
en un invertir pesado y frío…
Río de mis tontas dudas
que duran un descenso de mi río.
*
Aquí yo, ahí vosotros…
Otros supondrán que nos hemos perdido.
Se equivocan, evidentemente…
Solamente este puede ser nuestro camino;
Y entre pasos y vaivenes, entre errores,
entre baches y mil veces caídos…
Somos frutos de nuestro devenires,
mártires de este olvido
*
Y dos vidas se han vivido:
la de fuera y la del alma.
Solo una cuando estoy dormido…
Las dos cuando suena alarma
La de fuera y la del alma;
dos vidas yo he vivido
Dos cuando sonó la alarma…
Solo una ahora que estoy dormido
*
¿Con cuantas armas me han herido?
Quizás fueran demasiadas
o quizás demasiado pocas
porque en verdad pocas me matan
*
Tristes melodías de la silenciosa nocturnidad
que se entierran en los recovecos de esta cárcel
que resuenan haciendo vibrar la realidad
que traen de vuelta el eco de mi derrota constante
*
Afinada puntería la de la vida
que dispara verdades certeras
que hieren siempre con ironía
en lugares que nunca esperas